viernes, 18 de octubre de 2019

La necesidad de imponer

¿Por qué la gente solo ve su punto de vista? La mayor parte de los desencuentros y desacuerdos que muchas veces se tornan en violencia en nuestra sociedad está basada en la tozudez que por definición es irracional, que muchas personas muestran ante las diferencias de pareceres e inclusive caen en la inconsciente idea que los demás son los tercos porque no admiten el punto de vista que quieren imponer.

Es usual que el ego no le permita dar su brazo a torcer y de sentirse ofendidos en lo personal si alguien demuestra lo contrario a lo que ellos piensan, hace que estas personas se nieguen a aceptar argumentos racionales e incluso hechos comprobados, descalificando de forma inconsciente lo que contradiga su pensamiento , y lo que es peor y malévolo, descalificando aun siendo conscientes de su error. Lo importante es ganar, aunque sepa que lo que digo no es verdad, lo importante en imponer su voluntad. La violencia surge es cuándo dos tozudos se controntan entres sí, pero muchas veces los tozudos ganan porque su adversario imaginario es racional y no desea usar las mismas herramientas del tozudo.

Discurro que es una especie de proceso biológico y atávico de nuestros ancestros de cuando se formaron las primeras tribus de homínidos, para ser el cabecilla de estos grupos primigenios de sociedad, tenían que imponerse de cualquier manera sobre los demás rivales, incluyendo muertes y destierros, convenciendo a facciones y logrando un poder que le garantizaba posibles mejores posibilidades supervivencia y de dejar descendencia; esto estaba bien en esos tiempos.

Pero el ser humano evolucionó, lo cual hizo  que muchos de esos mecanismos se volvieran obsoletos, y se ha intentado que sean la razón, los hechos y el bien lo que guíen las conductas de las personas y las sociedades. Una especie del ideal de los filósofos griegos como Sócrates, Platón y Aristóteles, hasta cierto punto esto se ha logrado con los avances de la ley.

Aún así vemos en los ambientes políticos, económicos, académicos e incluso científicos, además de ámbitos más privados como las relaciones familiares y sentimentales, donde prevalecen estas conductas poco evolucionadas porque personas sin merecimiento alguno han llegado a posiciones de poder real o ilusorio por suerte, engaños o porque los demás no quieren imponer visiones y conductas irracionales y erróneas, cuando no peligrosas, solo por el simple hecho de sentirse importantes.

Un ejemplo usual es cuando imponen criterios estéticos sobre la salud y la vida, estas conductas usuales en personas poco empáticas y por demás superficiales, pueden poner en riesgo a los demás.

Las personas que hacen esto son claramente menos evolucionadas, menos inteligentes y por demás creo que con ciertas tendencias narcisistas y antisociales, que no miden el impacto de sus actos. Son promotores de violencia y tal vez de las personas que más daño social hacen.

Hago una invitación a que seamos conscientes de esas conductas para evitarlas, que no se las enseñemos a los hijos y actuemos como seres racionales, y no como los humanos prehistóricos.